Además de la yerba...

Obedeciendo a costumbres regionales en algunos casos o a su propio gusto o curiosidad en otros, algunos cebadores suelen agregar a mate distintos aditivos con el fin de modificar su sabor, aroma o apariencia. Si bien no existen límites ni convenciones al respecto de la calidad o cantidad de los mismos, se enumera a continuación los más comunes:

Cáscara de naranja o limón fresca o seca;
Gajo de menta, yerbabuena, poleo, cedrón, peperina, boldo, u otro yuyo fragante;
Una cucharadita de café;
Yema de huevo revuelta en azúcar molida agregada en cada cebado (muy vistoso por la espuma que forma).

Porque cebar?

¿Por qué se dice cebar mate en vez de servir mate?
El cebar mate bien, requiere una suma de conocimientos y cuidados especiales. En algunas familias antiguas sólo lo hacían sirvientas especialmente dedicadas a este arte, llamadas cebadoras de mate.
La palabra cebar expresa la idea de mantener, alimentar, sustentar algo en estado floreciente. Al decir cebar mate se quiere significar, no el acto de llenar el mate con agua caliente, sino mantener ese mate en condiciones siempre apetitosas.

Lo leí en: Soy Gaucho

Tendría que agregar que incluso hoy, entre los gauchos y arrieros o entre un grupo de amigos, sea en un taller mecánico, una oficina o un banco, siempre hay alguien que se especializa en hacerlo. Para aquellos tomadores habituales, generalmente exigentes, un mate mal cebado es casi un insulto. No es raro que se escuche decir, al tiempo que devuelve el mate, "no, este mate es de gringos" como atribuyendo la ignorancia en cebar mate a la nacionalidad del cebador.

Nueva yerba mate con bajo contenido de cafeína

Desarrollan una variedad de yerba mate con bajo contenido de cafeína y con antioxidantes
Se trata de la especie Ilex dumosa, cuyo bajo contenido de cafeína es del 0,15 % y además tiene un buen nivel de polifenoles, unos antioxidantes beneficiosos para la salud.
"Es una buena alternativa entre quienes consumen mate pero tienen intolerancia a la cafeína", señaló el Ingeniero Agrónomo Sergio Prat Kricun de la Estación Experimental Agropecuaria Cerro Azul del INTA en la Provincia de Misiones.
Por mucho tiempo, la especie Ilex dumosa fue cultivada y elaborada en conjunto con la yerba mate. "Era considerada un cultivo acompañante", afirmó Prat Kricun. Y agrega: "Con la creación de Comisión Reguladora de la Yerba Mate (CRYM) en 1935, se prohibió su mezcla con la yerba mate, que debía elaborase exclusivamente con Ilex paraguarienses, por lo que lentamente sus plantaciones fueron desapareciendo.

En aquel entonces estudios in vitro de Ilex dumosa indicaban la presencia de metabolitos vegetales que podían no ser aptos para el consumo humano, "sin embargo, diversas evaluaciones que realizamos comprobaron que al ser procesada esa planta, de forma similar a la yerba mate, se obtiene un producto seguro y de alta calidad para la salud humana", indicó Kricun.

Hasta 1990 existían plantaciones en pequeñas superficies en Campo Viera (Misiones), mezclada con yerba mate. Teniendo en cuenta las cualidades de esa especie para el consumo humano, Prat Kricun y un equipo de colegas obtuvieron cultivos mejorados de Ilex dumosa a partir del Banco de Germoplasma (colección de material vegetal vivo, en forma de semillas y otros recursos) disponible en esa unidad del INTA, el cual contaba con 24 orígenes de dicha especie.
"Las dos variedades de la especie Ilex dumosa se denominan ILM 44/6 INTA e ILM 48/3 INTA", indicó Prat Kricun. Y continuó: "Estas especies a fines a la yerba mate suelen estar poco afectadas por plagas y enfermedades, presentan amplia adaptación ambiental y alta tolerancia a bajas temperaturas y sequía. Asimismo tienen una excelente adaptación a la cosecha manual o mecánica y tienen un alto rendimiento industrial."

Si bien las dos variedades fueron inscritas este año en el Registro Nacional de Propiedad de Cultivares de la SAGPYA, en el año 2005 fueron incorporadas al Código Alimentario Argentino tras la realización de varias evaluaciones.
"Las variedades de Ilex dumosa se consumían en la época colonial en Brasil, Paraguay y Argentina. De hecho aún continúa su aprovechamiento conjunto con la yerba mate en yerbales naturales, localizados en los estados brasileños de Santa Catarina y Paraná. Algunos escritos indican que los misioneros jesuítas elaboraban con esa especie su afamada yerba mate Caá-Miní o 'Caá Mirí", aseguró Prat Kricun. Y agregó: "Ahora se retoma lentamente el empleo de esta variedad vegetal para la elaboración de infusiones."

Lo leí acá: link

Mates largos, mates cortos

La diferencia se hace en relación a la cantidad de agua con que es llenado el mate.
La duración recomendada de un mate (aquella en que el placer de tomarlo y su sabor encuentran un equilibrio natural) es de dos a tres sorbos más o menos normales. Podemos concluir entonces que no influirá en esta clasificación el tamaño físico del recipiente, sino la proporción que corresponde a la cebadura dentro de éste.

El tamaño del recipiente nos dará una idea del uso a que está destinado, debido a que la cantidad de yerba que éste pueda alojar está directamente relacionada con el rendimiento de la cebadura (cantidad de mates que puedan cebarse sin necesidad de arreglo o renovación), correspondiendo el mate de mayor tamaño generalmente a un uso grupal y el más pequeño al matero individual.

Influye sí la calidad de crecedora o no que pueda tener la yerba utilizada. Si la yerba es crecedora, se hinchará paulatinamente restando capacidad a la calabaza y, en consecuencia, acortando los mates. Para remediarlo, el cebador deberá hacerlo "bostear", es decir, valiéndose de la paletilla de la bombilla, desalojar una porción de yerba a fin de recuperar la capacidad originalmente destinada al agua.
Es el cebador quien deberá poner a prueba su conocimiento del mate (la capacidad de la calabaza) y la yerba utilizados, para armar la cebadura con la proporción correcta, a fin de lograr mates de una duración adecuada.
Por último, cabe señalar que un factor que indirectamente influye en la duración de los mates es la temperatura del agua que, aún cuando no varíe en su cantidad, actúa sobre la percepción del tomador, haciéndole acortar o alargar los sorbos. Así, para una misma cebadura, el agua más caliente nos dará la sensación de un mate más largo, y el agua de menor temperatura, de un mate más corto

El Mate. Tomo 1 (y no tomo más)

Tomo 1 y no tomo más

50 hectolitros de mates no sirven para inspirarse en escribir una nota.
Pero sí se los puede llegar a conocer lo suficiente como para escribir algún libro que se titule “Mate, introducción básica de la bombilla. Tomo 1” o “Filosofía, ciencia y mate. Tomo 1 y no Tomo más”. Desde tiempos remotos el hombre a cuestionado cuál es la esencia del mate, es decir, qué es lo que atrae al hombre (o mujer, no soy machista) a tomar mate. Elemento que, a la hora de las novelas, es para muchas mujeres, indispensable. Y práctico para un domingo a la tarde. Claro que con estos calores riojanos uno puede llegar a derretirse por dentro de la bombilla. ¿Pero díganme si en una mañana fresca de primavera no caerían bien unos matienzos?.
Conozcamos mejor este fenómeno.

CLASES DE MATES
Hay varias clases de mates, formas y color, para empezar están los de madera, que son los que crearon Adán y Eva, (por eso después Dios los hecho). Adán le había dicho a Eva:-¿Tomamos mate o fifamos? - Yyyy....yerba no hay!!. Contestó Eva. (El chiste es de ese tiempo también).

Después la ciencia, de la mano de la computación, hizo el de chapa enlozada y el de loza. Y ante la imposibilidad de poder comprarlos, se buscaron en la naturaleza y no naturaleza, objetos que tengan agujeros. Se utilizaron vasos de vidrios, vasos plásticos, latas de cervezas, chapitas de gaseosas, calabazas, cuernos, conchas (marinas), porongos (de esos no) y otras obscenidades parecidas. Por eso, se decía que era de los pobres, por los bajos recursos de donde lo sacaban. Mas tarde pasó a ser de los ricos, ya que la yerba valía oro. Y ahora estamos en igualdad, los ricos siguen tomando mate y nosotros seguimos siendo pobres.

INGREDIENTES
Ponerle yerba a un mate no es novedad. Ponerle azúcar es una suerte. Pero ponerle tilo, boldo, café, peperina, cáscaras secas de limón, de naranja, de banana, ruda macho, ajo, o cebolla es un verdadero elixir de la descompostura. Y hablando de elixir podríamos hablar también de los gualichos contra el odio, el mal de amores, envidia, hepatitis, diarrea, piorrea y la caspa. Pero de esto nos encargaremos mas adelante, (unos 50 años más adelante).

El Mate: Tomo 2 y me duele la panza


PREPARACIÓN.
En ésta parte nos referiremos sobre todo, a quién los va a preparar. Lo primero que hay que hacer es calentar el agua hasta que este a punto (de hervirse y no de evaporarse). Se le agrega azúcar (opcional) y le encajamos la bombilla como le meteríamos el dedo en ojo si nos dice que el mate es una porquería. Esperemos a que se caliente el agua para la...
CEBADA.
Tomar un mate corto es hazaña del más rápido. Hay que ser muy ágil para llevar ese mate a la boca antes de que se termine solo. Sin embargo, con el largo es dramático, uno se imagina que en ese mate esta dejando sin agua a vaya a saber cuántas familias. Es tan trágico como querer tomar uno tapado. Se le suele pegar por debajo suavemente con los dedos, si sigue tapado se le pega un poco más fuerte, si todavía insiste en estar tapado, se le suele revolear por las paredes, si no se destapó, es hora de que comience a pensar en un rico café con leche.
Una yerba nueva trae la espuma, y la espuma úlcera. Por eso lo mejor y aunque no sea muy rico son los lavados. Mate lavado, cago asegurado. Con los mates fríos es distinto, uno llega a sentir ese dolor de dientes que se asemeja al masticar un cubito.
Cuando nos ceban uno caliente, se presta virtual atención si el agua no cae al piso, atravesando el mate, posa mate y mesa.
Muchas veces nos deja un terrible dilema el mate tibio, ya que no sabemos de que quejarnos, porque frío no está, pero caliente tampoco.
Y lo más importante: siempre hay que asegurarse de que el primer mate nunca sea nuestro.

CONCLUSIONES
Con todo esto llegamos a la infeliz conclusión de tomar mate en cualquier lado es sólo para valientes. Nos encontramos, a veces, ante la impotencia de no poder cebar nosotros nuestros propios mates. Cosa que lamentamos pero no nos resignamos, al menos yo. Cuando tomo uno o dos mates y me dan lástima, le digo al cebador que está un poco amargo, si no le puede cambiar la bombilla, que le saque un poco de yerba y de paso que me traiga un vaso de chocolate caliente.
GeRO Gerardo Reimers Ortiz

Elegir una bombilla

Si bien existen diferentes materiales y formas que se han ido utilizando en la sociedad a través de diferentes culturas, se deberá respetar ciertas cualidades a la hora de seleccionar la bombilla:
Bombilla de metal de buena calidad. Las bombillas de baja calidad pueden transferir restos de partículas a nuestro organismo como ser aquellas con baño de cianuro de cobre, niquelado o cromado. No menor es la conductividad térmica del metal que deberá ser de buena calidad para mayor aislamiento térmico o terminaremos con los labios lastimados.

- Bombilla que no transfiera sabores y aromas. Las ideales son las de aluminio y de acero inoxidables ya que no trasfieren ningún tipo de sabor.
- Bombilla con pico aplanado y fuste inclinado. El pico aplanado con boca ancha permite que el agua llegue con mayor fluidez mejorando la succión y la temperatura ideal para la boca.
El fuste con cierta inclinación, al ser curvo en vez de recto, facilita la acción de tomar mate en ciertos lugares donde uno se encuentra recostado.
- Bombilla Paletilla. Filtro con una de sus caras planas para la mejor organización de la yerba dentro del mate, ideal para dar vuelta el mate.

Termo-metro

Termo gigante. Mide un metro de alto y su capacidad es de diez litros. Su invención es atribuida a un científico uruguayo amante de la típica infusión rioplatense. Se lo utiliza como termo-patrón, y es la unidad de medida universal para todas las cebadas de mate. Un termo-metro de platino se conserva en el Museo de Pesas y Medidas de Montevideo, junto a un mate y una bombilla del mismo material inalterable. Es el termo ideal para cebarle mate carrero a una caravana entera.

Douglas Wright
Lo vi acá: educared

El mate

El texto que transcribo es del sitio "Más respeto que soy tu madre" es una blogonovela de 200 capítulos que se publicó en Internet desde septiembre de 2003 y hasta julio de 2004. Escrita por Hernán Casciari e ilustrado por Bernardo Erlich, fue leído en innumerables programas de radio, mandado por Internet a través de correos, fue publicado en un libro y hecho obra de teatro. En el capítulo 122 habla sobre el mate...


El Zacarías y yo tomamos mate. Siempre. A cualquier hora. Las veces que estuvimos a punto de separarnos, las veces que llegó un hijo nuevo a casa, cuando lo echaron del trabajo, cuando Argentina salió campeón del mundo, cuando se cayeron las torres gemelas. Cuando murió mamá... Entre el Zacarías y yo hubo días sin besos a la mañana, semanas sin dirigirnos la palabra, meses enteros sin juntar los pelos, años larguísimos sin un peso en el bolsillo. Pero no hubo nunca en nuestro matrimonio un solo día sin que él o yo nos sentáramos en silencio a tomar mate.

El mate no es una bebida, corazones de otro barrio. Bueno, sí. Es un líquido y entra por la boca. Pero no es una bebida. En este país nadie toma mate porque tenga sed. Es más bien una costumbre, como rascarse. El mate es exactamente lo contrario que la televisión. Te hace conversar si estás con alguien, y te hace pensar cuando estás sola. Cuando llega alguien a tu casa la primera frase es “hola” y la segunda “¿unos mates?”.

Como cebar un buen mate


Esta es una infografia publicada por Clarín en el 2005.
La información completa: acá



Tomá mate



Una sencilla forma de hacer un mate argentino

La Pava

Los guaraníes colocaban el agua para calentar en una vasija de barro cocido. Pero con la llegada de los conquistadores vinieron también los calderos de cobre que reemplazaron a las vasijas aborígenes. Tenían forma de jarra y no llevaban tapa. A mediados del siglo diecinueve la pava, que se empleaba en las ciudades, "viajó" al campo y nuestros gauchos se habituaron a ella.

Una "pava" es un recipiente semejante a una tetera utilizado en la cocina para calentar el agua. En el Uruguay le dicen "Caldera" A diferencia de las teteras (en las que se sirve el agua para el té, que generalmente sólo reciben agua pre calentada) las pavas pueden ser usadas tanto para calentar agua directamente como para servirla. Suelen ser metálicas, usualmente de acero inoxidable o aluminio; esmaltadas o enlozadas. Tienen un asa superior deslizable con madera o resina plástica incrustada para poder manejarlas. Habitualmente tiene una abertura superior con tapa por donde se le introduce el agua y un pico fino y curvado con una muesca, lo que la hace ideal para su uso en el cebado del mate.

La denominación pava extendida en Argentina deriva de una metáfora risueña en su origen, ya que el perfil de este recipiente recuerda al de las aves llamadas pavas y el pico vertedor tradicionalmente tiene una forma que recuerda al del pico y apéndice carnoso de los pavos.

También están las pavas a presión en las cual el agua se introduce por el pico y esta silba cuando el agua hierve. También están las eléctricas que mantienen el agua a temperatura ideal.

Mate fashion

El mate esta en todos los lugares de la argentina, incluido en la oficina más paqueta. Gracias a unos diseñadores el mate se aggiorna y no queda descolgado en algunos lugares donde reina el café o el té. Los diseñadores de "Cuatro Estudio" crearon cuatro modelos distintos: de algarrobo y aluminio; Calden y aluminio; Calden y cuero o Palo Santo y aluminio. Lo único malo es que no se consigue en cualquier lado. Están en grandes ciudades como Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza.

Para más datos te dejo el contacto de estos cuatro mates: Link

Se lo enseño Patoruzú

Batman, un superhéroe que toma mate para recuperar energía y alimentar el cuerpo.

Detective Comics #786, noviembre de 2003. Guión de Ed Brubaker. Bruce Wayne, o sea Batman, regresa a la Baticueva junto a un superhéroe aliado para continuar la investigación de un caso. Alfred, su leal amigo y suerte de criado aparece en escena con una bandeja cargada de tazas humeantes y anuncia “Your yerba mate, master bruce, as requested” (su yerba mate amo Bruce como me ha requerido). Ni el adictivo café ni el monopolizadamente british té. Mate. Yerba Mate.

Y es que el mejor detective de historieta necesita alimentar su cuerpo con lo mejor de lo mejor y ya sabemos que el mate cada día tiene más cosas. Pero también me plantea dudas de la inclusión inocente de esa infusión en un comic de superhéroes.

Batman también es un ferviente consumidor de una infusión de yerba mate

¿Se esta redefiniendo el origen del personaje? ¿Nació Bruce Wayne realmente en los Estados Unidos de Norteamérica o emigró allí con su familia cuando niño cambiando su nombre Bruno Díaz por uno más anglosajón? No seria el primero ni el último por lo menos.

Fuente: Amo del Universo DC (amodeluniversodc.blogspot.com)
Leer la nota completa: Aquí

Libro dedicado a la yerba mate

Atención materos: salío a la venta un libro dedicado a la yerba mate

El mate desde la mirada de una sommelier: un recorrido por la historia, la elaboración, y la cata de la yerba mate.

El libro describe: la historia de la yerba mate, la elaboración, el mate, los utensilios hasta el ritual del mate. Además, la cata de la yerba mate, los maridajes, recetas y tragos elaborados con yerba mate y una interesante guía de las yerbas que se pueden consumir en nuestro país e incluso Uruguay y Brasil con una minuciosa descripción organoléptica. Escrito por Karla Johan Lorenzo y el libro se llama “El libro de la Yerba Mate” (Editorial Del Nuevo Extremo)

Lo conseguís a $95 en todas las librerías.

Señora Gaucha

El mate tiene virgen propia, aunque no hay un hecho milagroso relacionado a esta Señora Gaucha. No se le apareció a ningún campesino ni curó a un niño enfermo. La imagen la encargó un monje a la pintora María Inés Rosñiski, para que hubiera una virgen cercana a la gente y “bien argentina”. Igual, muchos litoraleños le rezan, le piden, le agradecen.

Preparar el mate

Tortas fritas


Generalmente, en un día lluvioso que impide las labores al aire libre, es una costumbre de la patrona prepararlas. Un amasijo con harina, agua, sal y grasa, sobado con sus puños para que resulte una masa tierna, estirada y cortada informalmente o en pequeños bollos, ahuecado con el dedo, dando forma a una tortita, se fríe en grasa de vaca, cerdo o de oveja. Calentita y pasadas por azúcar, las tortas fritas acompañan el mate en interminables rondas, donde las anécdotas son elemento de interés para alegrar la ceremoniosa reunión. Como en el asado, los aplausos son de norma para la cocinera.

Poder disfrutar del sabor y el olor de esta masa simple, nos hace acordar de nuestra niñez, de nuestras mamas o abuelas, motivo siempre de un renovado y nostálgico momento. Son las clásicas masas fritas que acompañan una verdadera mateada. En Argentina, las tortas fritas hacen parte del folclore. y acá te explico como prepararlas... Ideal para esos días lluviosos.

La yerba personalizada

Los sabores del mate están cada vez más diversificados. "Cuando uno va a la góndola de los supermercados se encuentra con carteles que hablan de atributos muy variados", comenta Olga Tamasi, del Laboratorio de Sentidos Químicos de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires.

La profesora Amalia Calviño, de la misma facultad, es una amplia conocedora de las bases neurológicas del sabor. Es decir, de los detalles de cómo se perciben los distintos sabores. Al parecer, con ese conocimiento, que se desarrolla cada vez más, y las variables físico-químicas que tiene naturalmente el mate, es posible pensar un futuro con nuevas variedades para disfrutar.

Se podrían obtener sabores prácticamente personalizados al gusto del cliente. Porque al igual que el té, que ya tiene una variante gourmet, el mate también está en condiciones de tener sus opciones de diseño. Es decir, prepararse con yerbas que tengan atributos cada vez más específicos.

Y vos como lo preferís?
Esta nota la vi en: Clarín

La leyenda de la yerba mate

Un día, la diosa Así, la Luna, y su amiga Aria, la Nube rosada del crepúsculo, quisieron bajar a la tierra.
Tomaron sus formas corpóreas y descendieron en una zona de tierras rojas y bosques cuyos habitantes adoraban a Tupá, padre de Así. Mientras paseaban se les apareció un jaguar dispuesto a atacarlas. Ellas quedaron inmóviles. En ese momento se presentó un viejo indio que se enfrentó al peligroso animal y lo mató. El hombre invitó a las jóvenes a su cabaña donde, a pesar de la pobreza, su mujer preparó para las jóvenes panes con los últimos granos de maíz que le quedaban.
Las diosas quedaron maravilladas por la hermosura e inocencia de la joven hija del matrimonio, sobre todo Así quien sintió fuerte curiosidad por saber por qué los ancianos la escondían en el bosque.

La Bombilla

El diccionario de la Real Academia Española, define bombilla como: "caña delgada de que se sirven para sorber el mate en América, tiene unos veinte centímetros de largo y medio de diámetro, y por la parte que se introduce en el líquido termina en figura de una almendra llena de agujeritos, para que pase la infusión y no la hierba del mate. También las hay de plata y oro. El indígena del Paraguay la llamó primitivamente, en su lengua (Guaraní), tacuapí".

Sin la bombilla no hay mate. Las primeras formas de beber la yerba mate consistía en ingerir conjuntamente las hojas con el agua masticándolas, o filtraban el agua de las hojas con los dientes. Esta forma evolucionó hasta incluir en el proceso de ingesta de la infusión una cañita denominada por los guaraníes "tacuapí". Tacuapí tiene como significado “caña hueca” y era la parte media de la caña entre nudo y nudo, con agujeros en su base, utilizándose para filtrar la yerba.

Mate Galleta - Jose Larralde



Aparte de escuchar a Don Larralde, te dejo la letra para que la vayas cantando mientras te tomas unos amargos.

Analizan científicamente el sabor del mate para saber por qué gusta tanto

El sabor amargo y la yerba sin palo son los atributos principales para los materos. Lo determinó un grupo de investigadores de la UBA y el Conicet en un encuentro reciente.

La yerba sin palo aguanta más en sabor que la que tiene palo. Porque es más resistente al lavado y porque tiene mayor cantidad de cafeína y otros compuestos propios de la yerba. Los expertos materos nunca tuvieron dudas de que eso era así. Pero comprobarlo científicamente es otra cosa. El Instituto de Química y Metabolismo del Fármaco y el Laboratorio de Investigaciones Sensoriales, los dos del Conicet, organizaron un encuentro para comentar lo último que se sabe sobre la infusión y sobre cómo se perciben algunos sabores.

Matemáteco

Un matemáteco, es un Científico que estudia las relaciones numéricas que existen entre los mates.

Los matemátecos tienen un mate bárbaro para los números y son en su mayoría uruguayos (el Uruguay es un país donde se toma muy en serio todo lo relacionado con esta infusión).

Douglas Wright
Lo vi acá: educared

El curado final

Curar un mate es la parte más importante, después de la primera fase todavía es aconsejable un periodo de adaptación distinguiendo si la calabaza será destinada para mate amargo (galleta) o mate dulce (poro). Nunca compres mates baratos de madera o que tengan pequeñas grietas. ya que estos no pasan la parte del curado.
  • Curado para Mate Amargo
En el caso de mate amargo llenar la calabaza con yerba nueva, agregar agua hirviendo y dejar descansar hasta el día siguiente. Esta infusión terminará impregnando las paredes del recipiente y puede considerarse ya listo para disfrutar de una ronda de mate. No obstante el primer mate se ofrece a un desentendido, porque en el caso de no estar bien, al final ha sido para un “zonzo”.
  • Curado para Mate Dulce
En el caso del mate dulce, llenar el mate con agua, azúcar y sacudirlo hasta que las paredes del interior queden impresas en azúcar. Cómo segundo paso dejaremos que se seque, lo enjuagamos con agua caliente-sin hervir- y lo cargamos con yerba humedecida con agua caliente. Por último esperar 24 horas y lavarlo bien.

Otra técnica es echar adentro de la calabaza un terrón o dos cucharaditas de azúcar y una pequeña brasita de leña bien encendida. Se tapa la boca y se agita haciendo que la combustión de azúcar y sus humos endulcen y perfumen la corteza interior de la calabaza. Luego conviene hacer unos cuantos mates, chuparlos y tirarlos, antes de empezar a disfrutar de unos buenos mates.

Curar el mate

Este proceso está destinado únicamente para aquellos que tengan sus paredes internas la capacidad de quedar impregnadas con el "espíritu de la yerba", y no transmitan a la bebida sabores extraños, aunque el curado del mate se prolonga durante toda su vida útil como recipiente.
Curar un mate, significa el proceso de adaptar el recipiente fabricados con materiales porosos, especialmente (y por excelencia) los construidos con una calabaza ahuecada, pero también los de madera.
Pero fundamentalmente es para evitar que no se raje con el agua caliente e impedir la formación de hongos y moho.

Técnicas:
  1. Para hacer el curado se deja el mate preparado (como si fuéramos a tomarlo) por un tiempo antes de usarse por primera vez, generalmente de uno a cinco días. El tiempo depende del grosor del material.
  2. Otra es la misma que la anterior, pero dejándola un día, limpiarlo y volver a repetir el proceso dos o tres días hasta que quede tapado todos los poros.
  3. Untar con manteca o aceite cubriendo sus poros (yo prefiero usar manteca). Esta técnica sirve para alargar la vida útil del mate y es la más recomendable si querés comenzar a utilizar el mate lo antes posible. El proceso durará alrededor de 3 horas cómo mínimo.
  4. La última técnica es llenar el interior del mate con yerba húmeda de otra cebada e ir agregando agua tibia sin permitir que se seque. El tiempo de este proceso no debe ser menor a 24 horas.
  5. En el caso de mate de hueso, hay que dejarlo en remojo con agua y detergente por lo menos 24 horas. De esta forma eliminarás todos los factores que producen un gusto desagradable en este tipo de mates.
  6. Hay otras opiniones, que dicen que el mate se cura cebando.
De la misma manera, aquellos mates construidos con materiales no porosos, como los de plástico, vidrio, porcelana, aluminio o cerámica, son los denominados incurables, porque una vez lavados, pierden todo recuerdo del sabor de la yerba, así tengan años de uso. Estos últimos son ideales para los indecisos, que un día toman amargo y al otro dulce.

Otra ronda

Una tarde en la que la familia se reúne a pasar un buen momento juntos para compartir y disfrutar unas rondas de mate.



ANIMACION, dibujo sobre papel (2007) Taller de Cine "El Mate"
Digital - mini DV
Realización:
Juan Ignacio Gudiño (15 años)
Santiago Agostinelli (17 años)

Reglas para compartir un mate

  • Brindar un mate al recién llegado es una cortesía, traduce el agrado o felicidad que se siente hacia el recién llegado. Si el invitado lo rechaza se traduce como desprecio.
  • El mate no se puede pedir, por más ansias que se sientan.
  • El invitado al tomar mate no puede regir la forma de cebarlo. Entre otras cosas, no puede cuestionar ni la temperatura, ni los aditivos que se le agregan, como el azúcar o los yuyos.
  • Es correcto sorber totalmente el mate, sin importar la particular sonoridad final del mate que nos indica que está vacío.
  • Nadie puede tomar menos de dos mates.
  • El primer mate, es para los espíritus, el segundo y el último para el cebador.

Manías, rituales y obsesiones de los tomadores de mate

Así como a los ingleses se los relaciona con el té, a los escoceses con el whisky, a los colombianos con el café, y las gaseosas son el patrimonio cultural de Estados Unidos, el cliché indica que a los argentinos y uruguayos se nos debe asociar al mate. Aunque muchos no veamos la gracia de chupar un palo metido en un montón de yuyos mojados cuando bien podemos hacer una rica infusión sin tanto aspaviento, igualmente cargamos con su estigma alrededor del mundo.

La popularidad del mate no tiene una explicación demasiado lógica. A pesar de sus innumerables complicaciones (no se puede tomar en la calle, se necesitan utensilios muy específicos, hay que cambiar la yerba varias veces y mantener el agua caliente todo el tiempo), el mate debe ser la bebida que más pasiones despierta en nuestro país. Tiene detractores y fanáticos, y en consecuencia hay un montón de teorías personales, técnicas infalibles y recetas dando vueltas. Están quienes defienden el mate amargo, los que lo toman frío, los que no pueden compartirlo, y también el caso opuesto: los que lo toman con todo el mundo.

Previsiblemente, a mí el mate no me gusta. Y no sólo no me gusta, sino que las manías obsesivas y patológicas que los demás tienen con el mate me resultan insoportables. Es un ritual de apariencia campechana y simple pero que en realidad está lleno de prohibiciones (no le pongas azúcar, no muevas la bombilla, no mojes toda la yerba, no hiervas el agua, no uses el mate sin curar) y de celosos procesos que cada cebador transforma en una cuestión de principios que debe defender a muerte. Además, es una asquerosidad. Nunca falta un inadaptado con la boca en pésimas condiciones mendigando un mate inmune a la mirada de terror de los demás.


Un relato del 1811

...el mate, así llamado por la calabaza en que esta bebida se presenta siempre. Es una infusión de hierba del Paraguay, que es de un gusto amargo y acre. Esta infusión es endulzada, y a veces se le agrega un poquito de canela y de corteza de limón. La calabaza, o mate, se coloca sobre un soporte de plata, y el líquido es absorbido a través de un tubo de plata, provisto en su extremidad inferior de un ensanchamiento globular, todo perforado por pequeños agujeros para evitar que alguna partícula de la hierba pase por él. El mate es el lujo de los ricos y el solaz de los pobres. Lo beben apenas se levantan de la cama por la mañana y después de la siesta, por la tarde, y a menudo se deleitan con él durante el día.

Diario de Viaje a Río de Janeiro, Buenos Aires y Chile. 1810-11", J. R . Poinsett - Estadounidense.

Vista de Buenos Aires en 1790. Grabado del libro Viaje por la América Meridional de Félix de Azara