Elegir una bombilla

Si bien existen diferentes materiales y formas que se han ido utilizando en la sociedad a través de diferentes culturas, se deberá respetar ciertas cualidades a la hora de seleccionar la bombilla:
Bombilla de metal de buena calidad. Las bombillas de baja calidad pueden transferir restos de partículas a nuestro organismo como ser aquellas con baño de cianuro de cobre, niquelado o cromado. No menor es la conductividad térmica del metal que deberá ser de buena calidad para mayor aislamiento térmico o terminaremos con los labios lastimados.

- Bombilla que no transfiera sabores y aromas. Las ideales son las de aluminio y de acero inoxidables ya que no trasfieren ningún tipo de sabor.
- Bombilla con pico aplanado y fuste inclinado. El pico aplanado con boca ancha permite que el agua llegue con mayor fluidez mejorando la succión y la temperatura ideal para la boca.
El fuste con cierta inclinación, al ser curvo en vez de recto, facilita la acción de tomar mate en ciertos lugares donde uno se encuentra recostado.
- Bombilla Paletilla. Filtro con una de sus caras planas para la mejor organización de la yerba dentro del mate, ideal para dar vuelta el mate.

Termo-metro

Termo gigante. Mide un metro de alto y su capacidad es de diez litros. Su invención es atribuida a un científico uruguayo amante de la típica infusión rioplatense. Se lo utiliza como termo-patrón, y es la unidad de medida universal para todas las cebadas de mate. Un termo-metro de platino se conserva en el Museo de Pesas y Medidas de Montevideo, junto a un mate y una bombilla del mismo material inalterable. Es el termo ideal para cebarle mate carrero a una caravana entera.

Douglas Wright
Lo vi acá: educared

El mate

El texto que transcribo es del sitio "Más respeto que soy tu madre" es una blogonovela de 200 capítulos que se publicó en Internet desde septiembre de 2003 y hasta julio de 2004. Escrita por Hernán Casciari e ilustrado por Bernardo Erlich, fue leído en innumerables programas de radio, mandado por Internet a través de correos, fue publicado en un libro y hecho obra de teatro. En el capítulo 122 habla sobre el mate...


El Zacarías y yo tomamos mate. Siempre. A cualquier hora. Las veces que estuvimos a punto de separarnos, las veces que llegó un hijo nuevo a casa, cuando lo echaron del trabajo, cuando Argentina salió campeón del mundo, cuando se cayeron las torres gemelas. Cuando murió mamá... Entre el Zacarías y yo hubo días sin besos a la mañana, semanas sin dirigirnos la palabra, meses enteros sin juntar los pelos, años larguísimos sin un peso en el bolsillo. Pero no hubo nunca en nuestro matrimonio un solo día sin que él o yo nos sentáramos en silencio a tomar mate.

El mate no es una bebida, corazones de otro barrio. Bueno, sí. Es un líquido y entra por la boca. Pero no es una bebida. En este país nadie toma mate porque tenga sed. Es más bien una costumbre, como rascarse. El mate es exactamente lo contrario que la televisión. Te hace conversar si estás con alguien, y te hace pensar cuando estás sola. Cuando llega alguien a tu casa la primera frase es “hola” y la segunda “¿unos mates?”.

Como cebar un buen mate


Esta es una infografia publicada por Clarín en el 2005.
La información completa: acá